La cooperativa valenciana Koynos busca empresas y organizaciones con las que establecer marcos de colaboración para el impulso de la inclusión sociolaboral de las personas con discapacidad intelectual. La pandemia de la Covid-19 ha hecho aún más grande la brecha laboral y de participación social para este colectivo ante las dificultades de adaptación a las nuevas medidas de prevención, como la limitación de las relaciones sociales o el teletrabajo. Además, servicios como los centros ocupacionales o los centros de educación especial han tenido que reinventarse para poder seguir atendiendo a sus personas usuarias.

 

Otras barreras, como la del acceso a la información, también han sido excluyentes para personas con discapacidad intelectual durante la pandemia. La ausencia de información adaptada sobre cómo empresas e instituciones se han ajustado a las nuevas circunstancias o la escasa aplicación de las normas de accesibilidad cognitiva dificultan la asimilación de las nuevas normas, medidas de prevención y formas de trabajar para las personas con dificultades de comprensión. Servicios de adaptación y validación de la información y el entorno para personas con dificultades de comprensión, como el que ofrece Koynos Cooperativa, dan trabajo directo a personas con síndrome de Down, y otras personas con discapacidad intelectual, y son necesarios para garantizar la accesibilidad universal de empresas e instituciones.

 

De cara al futuro, una de las principales apuestas es el desarrollo de proyectos de vida independiente en un entorno comunitario. El objetivo es la consolidación del derecho a vivir con independencia y a la ciudadanía plena de las personas con discapacidad intelectual, y también se buscan alianzas para la colaboración en diferentes aspectos del proyecto.

 

Otra forma de cooperar es la participación en los programas de prácticas laborales, en los que ya se han contado con varios casos valorados positivamente tanto por los empleadores como por las personas participantes en sectores tan diversos como la hostelería, la reprografía, el comercio o la administración pública. Igualmente, la cooperativa valenciana está abierta a otras formas de colaboración o patrocinio para seguir trabajando ante nuevos retos en los que las personas con discapacidad intelectual tienen mucho que aportar