Más de un centenar de personas se reunieron en un acto organizado por Koynos Cooperativa para hablar sobre tecnologías y apoyos para personas con discapacidad intelectual, el 29 de enero en el centro de innovación Las Naves de Valencia. La jornada consistió en una mesa redonda donde Marián Ferrús, Francesc Bañuls y Javier Sevilla, tres ponentes de amplio reconocimiento y experiencia en este ámbito, expusieron su punto de vista tanto a familias como a profesionales y estudiantes.

Marián Ferrús, de la Red de Educación de FEAPS Comunidad Valenciana, hizo un especial hincapié en la necesidad de una implicación multidisciplinar para la creación de apoyos para personas con discapacidad intelectual. Independientemente de sus capacidades, es fundamental que “toda la sociedad esté comprometida” con la educación de un niño. Pero más aún en el caso de una persona con discapacidad intelectual pues, según explicó Ferrús, "la educación inclusiva ya no es una cuestión de debate, sino un derecho reconocido”.

Conocimos la experiencia del Centro Autonómico de Referencia en Discapacidad (CARD) Capacitas de la mano de Francesc Bañuls. Esta entidad, impulsada por la Facultad de Psicología, Magisterio y Ciencias de la Educación de la Universidad Católica de Valencia, pretende consolidarse como un servicio de atención pública entre quienes generan los apoyos y las personas que los necesitan. Entre los servicios que ofrece el centro, "en la unidad de productos y tecnologías de apoyos valoramos, asesoramos, orientamos y entrenamos en recursos TIC”, explicó. Esta es una apuesta especialmente útil para futuros profesionales que quieren formarse específicamente en el ámbito de la discapacidad intelectual.

Mucho más técnica fue la intervención de Javier Sevilla, miembro del Instituto de Robótica y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de la Universitat de València. Sevilla nos introdujo en los apoyos que se pueden extraer del uso de las TIC, como el trabajo con tablets y aplicaciones. Aún así, según nos explicó, "hay mucho más allá de las tabletas y smartphones, que pueden ser útiles” y, en cualquier caso, la tecnología que adquiramos es la que se debe de adaptar a las necesidades de la persona. Cada día podemos encontrar más avances en este sentido, incluso nos avanzó que se está trabajando en el desarrollo de sistemas para "ayudar a encontrar patrones para conocer el origen de las rabietas u otros problemas".

Tras la mesa, moderada por Cristina Santamaría, tuvo lugar un interesante debate en el cual surgieron dos cuestiones de importante trascendencia. Por una parte, la necesidad de formar en el ámbito de la discapacidad intelectual a todos los alumnos de las facultades de magisterio como único vehículo para garantizar la inclusión educativa. Por otra, la necesidad de la formación en las tecnologías de la comunicación para personas mayores, como forma de poder implementar estos nuevos apoyos también desde las familias. 

La jornada concluyó en tono festivo con un aperitivo para los asistentes preparado por el nuevo Taller de Cocina de nuestro Centro Ocupacional en la recepción del espacio Las Naves.